jueves, 4 de abril de 2013

Tu puedes.

Hola amigos del Blog.

Hace algunos días, me enfrenté a una nueva ruptura. Claro, las rupturas son cosa de la vida, son cosas que suceden. Las personas van vienen en el mundo y a veces nos topamos con ellos. Una amiga me contó hace unos días su experiencia con su novio actual, me dijo:

"Yo conocí a mi novio un domingo a las 2:00 pm en una plaza comercial, fuera de un mc Donalds, eso es destino"

Le dije: Caray eso parece más casualidad que causalidad. Algo que parece mucha más causalidad sería lo que me pasó con una exnovia.


Nos conocimos por medio del amigo de un amigo (típico) entonces yo me trasladé hacia la ciudad donde ella vivía por invitación de este comentado amigo, cuando comenzamos a vivir juntos, conocí a una de sus compañeras de trabajo, que por casualidad su novio se conocía con otro amigo mío de la universidad, esa podemos decir que era casualidad. Tiempo después mi ex me presentó a un amigo que había sido novia de una compañera de mi universidad. Todo esto a más de 1,000 kilometros de distancia. 3 personas en 2 distintas ciudades se conocían y me conocían a mi y a mi ex... Eso es lo que yo llamaría causalidad.


Pero hacer este tipo de ejercicio mental es un poco absurdo, solo daña la mente, la mantiene ciclada en un problema sin solución. La chica con la que acabo de terminar, llegó de Alemania para hacer una maestría y simplemente un día nos cruzamos en el camino, ¿destino? naaaah solo casualidad, no podemos atribuirle poderes de predestinación a las casualidades. Las mujeres tienden a hacerlo mucho, los hombres en menor medida, pero el resultado siempre es el mismo "catástrofe".


Y se vienen los famosos dolores, el miedo, la sensación de fracaso por la ruptura. Ahora bien eso ya está muy dicho en mi blog, por lo que no me detendré en ello. Lo anterior solo me sirve de marco para iniciar el tema de hoy y mostrarles que todos estamos a expensas de fracasos y desamores, pero no es el fin del mundo ni algo mal en el orden natural de universo. Porque cuando estamos en esto, parece que todo está mal en el mundo, que las leyes de la naturaleza están contra nosotros, que lo que nos pasó es anti natura. Pero por su puesto que no es así.


El sentimiento de dolor y fracaso puede provenir de esa forma de ver la vida, afortunadamente, tenemos un don maravilloso que Dios no regaló "el libre albedrío". Tenemos este Don tan maravilloso y decidimos esclavizarnos al dolor y a la angustia. Es un poco tonto, pero así es... Le damos la espalda a la vida y a nosotros mismos, comienza una serie de sucesos ininterrumpidos en espiral descendente que termina por crear una versión patética de nosotros. Nos ocultamos en la inactividad para no enfrentarnos a la vida, porque es dolorosa y de eso ya no queremos saber nada.


¿No te das cuenta de que si tenemos un destino es el dolor?  ese sentimiento nos hace sentirnos vivos, es una sensación maravillosa si la sabemos apreciar, puede ser fuente de inspiración, creación y sabiduría. El dolor también es evitable pero al final es inevitable. Así que podemos usarla, en lugar de que esperemos la destrucción de toda la vida, podemos usarla como motor, solo es cosa de enfrentarla a la cara y decirle " tu no podrás conmigo" "Yo soy dueño de mi destino, no mi destino dueño de mi" " Soy el resultado de lo que me digo y no de lo que me pasa" "No importa quién fui ayer, sino lo que soy hoy"  "Tomaré las riendas de mi vida y seré el dueño y señor de mis sentimientos"


¿Es duro? sí, pero nada es fácil en la vida, solo lo que no es apreciable o lo que no vale la pena es fácil... lo mejor del trabajo duro es que siempre, inevitablemente tiene una deliciosa recompensa. Así que no permitan que su felicidad dependa de nadie más que de ustedes mismos... Disfruten este vídeo que les dejo que siempre me motiva....




y les dejo otro que habla de dolor y como podemos enfrentarlo





Les comparto la liga de mi libro "Superarlo o morir"

http://www.amazon.com/dp/B01BLXSSRG?ref_=pe_2427780_160035660